Diferencia entre reciclado y reutilizado

Es evidente que durante el último siglo hemos adoptado un modelo de producción y de consumo totalmente insostenible para el planeta. Uno que devora los recursos naturales y genera demasiada contaminación. Uno que debemos compensar de alguna forma. Y esa forma son las tres erres del reciclaje, dentro de las que se encuentran la reducción, la reutilización y el reciclaje. Porque no: estas dos últimos no son sinónimos.

Qué es reciclar

El reciclaje puede entenderse como la transformación de productos de desecho en materias primas que son empleadas posteriormente para fabricar nuevos productos. Además, también podemos enmarcar en el reciclaje la explotación de materias primas orgánicas para generar energía. Ambas cosas son clave.

Y lo son porque el ritmo de producción y consumo de nuestra civilización es voraz. En este sentido, todas las materias primas a las que damos una segunda oportunidad mediante el reciclaje evitan que tengamos que ir a la naturaleza en busca de nuevas materias primas. La sostenibilidad es una tarea de todos.

Ventajas de reciclar

La principal ventaja del reciclaje es, como ya hemos indicado, la reducción de la explotación de los recursos naturales. Esto produce, a su vez, que los hábitats naturales padezcan menos daños por la actividad humana y los animales que los habitan puedan sobrevivir en paz. Además, el reciclaje también reduce la emisión de gases de efecto invernadero, responsables en buena medida del cambio climático.

Ejemplos de reciclaje

Son muchos los productos que pueden reciclarse en la actualidad gracias a los conocimientos y a los medios técnicos disponibles. Entre ellos encontramos los más habituales en las ciudades como son los plásticos, los vidrios, los papeles o los cartones. Además, también pueden reciclarse otros productos como los textiles, los aparatos electrónicos o algunas materias primas como la madera.

En qué consiste reutilizar

La principal diferencia entre reciclado y reutilizado es que el primero implica tratar de manera avanzada los residuos para transformarlos en materia prima nueva, mientras que el segundo consiste en pensar algún modo ingenioso de dar un segundo uso directo al producto. Es mucho más amateur.

En ese sentido, estamos reutilizando unos zapatos cuando los donamos a una organización benéfica. Pero es reutilización también cuando transformamos una garrafa de plástico en un macetero para nuestras plantas. O cuando usamos la ropa vieja como trapos de cocina. La reutilización también es crucial.

Ventajas de reutilizar

Las ventajas de la reutilización es que consume menor energía. El reciclaje es un procedimiento necesario, y muy valioso, pero también consume energía en el traslado y transformación de los desechos. Por su parte la reutilización es más limpia: solo tienes que llevar los productos a donde quieras donarlos o convertir uno de tus desechos en algo útil para tu casa. No hay consumo. Solo creatividad o generosidad.

Ejemplos de reutilizado

Antes ya hemos proporcionado algunos ejemplos de reutilización, pero existen muchísimo más. Es más, hay tantos como ideas puedan tener las personas. Latas de refresco que se convierten en lapiceros, tapones para botellas que se convierten en chapas para jugar, lavadoras viejas que se convierten en muebes para guardar cosas o capsulas de café que se convierten en jardines verticales. No hay límites.

Diferencias entre ambos

Como ya hemos comprobado, la principal diferencia entre reutilización y reciclaje está en la complejidad del procedimiento. Y con esto no quiere decir que el reciclaje no sea beneficioso. Hay veces que no tenemos una posibilidad clara de reutilizar. Y no pasa nada. Se deposita el producto en el contenedor de reciclaje óptimo y listo: esas materias primas servirán para fabricar nuevas cosas. Pero si puedes reutilizarlas de una manera ingeniosa y útil, adelante. El planeta te lo agradecerá mucho. A veces la pequeña diferencia entre reciclaje y reutilización de desechos sólidos puede convertirse en una gran diferencia.